La primera Guerra Mundial terminó y después de haber realizado su servicio para el ejército británico tres jóvenes poetas deben regresar a su vida de antes de la guerra. ¿Cómo cambiar los fusiles por las bancas de la universidad? La labor no resulta para nada sencilla, pues fantasmas merodean dentro y fuera de ellos mismos. Es en este complicado contexto que en su camino se cruza un muy peculiar personaje, Lawrence de Arabia, el Rey sin corona. Su llegada traerá consigo a la vida de los poetas cambios que, a su vez, los llevarán a replantearse su vocación. Las palabras, dicen, dan significado a las cosas, son creadoras y destructoras de mundos y en manos del poeta guardan un poder especial. “Nos toca a nosotros decidir cómo usar la pequeña fuerza creativa que poseemos”.