Más allá de sus destructivos efectos sobre el nivel de bienestar de muchos países, la presente crisis parece haber significado un punto de inflexión en la marcha de la economía internacional. La crisis ha sacudido alguno de los supuestos en que descansaba la opinión económica más ortodoxa y ha puesto de relieve la necesidad de acometer profundas reformas para atenuar los niveles de riesgo del sistema financiero internacional y dotar a la economía mundial de los mecanismos de gobernanza adecuados a las condiciones del presente. Al tiempo, la crisis ha confirmado el desplazamiento hacia Asia del dinamismo económico internacional y la emergencia de nuevas potencias, cada vez más activas, procedentes del mundo en desarrollo, además de haber emplazado también una revisión profunda de los mecanismos propios del sistema de cooperación para el desarrollo, no sólo para garantizar los adecuados recursos y la eficacia del sistema, sino también para integrar nuevos temas a su agenda. Pues bien, al análisis de todos estos aspectos se dedica el presente libro, el cual reúne a un selecto grupo de expertos de reconocida trayectoria en el estudio del sistema internacional.