En julio de 1943, Thomas Mann leyó la monografía ´´Shönberg y el progreso´´ de Theodor W. Adorno y encontró una peculiar afinidad entre ese trabajo y su Doctor Faustus. Esa lectura, y la invitación de Mann a Adorno a reflexionar juntos sobre las obras del personaje central de la novela, son el origen y el fundamento de la correspondencia que mantuvieron hasta el momento de la muerte de Mann en 1955.