Los poemas que conforman La tierra oscura revisitan los momentos decisivos en la vida del llamado último zapatista: Rubén Jaramillo, y la lucha por los derechos de los campesinos a lo largo de su vida. Silvia Tomasa Rivera configura una voz poética potente y sin afectamientos con la que logra explorar la lucha interna del zapatista, por seguir creyendo en la revolución y en sus ideales aunque todo esto lo lleve, inexorablemente, a su subsecuente traición y muerte.