El grabado en madera japonés mostraba paisajes impresionantes, erotismo que provocaba sonrojo, fantasmas y demonios que atormentaban a los vivos, y convertía a los luchadores de sumo y a los actores de kabuki en estrellas de rock. Este libro revela los grabados más excepcionales de 1710 a 1925, extraídos de las mejores impresiones de museos y colecciones privadas de todo el mundo.